Sueño de niña
Yo de niña soñaba, sí, soñaba
con el azul del cielo,
¡cuán hermoso en la noche de las estrellas
su fulgor y centelleo!
y creía ver una, más brillante y hermosa
que mi imaginación forma le daba.
¿Quién era aquella estrella
que en la noche veía?
¿Era la imagen de mi madre
que yo no conocía?
No sé, pero mi corazón se iluminaba
con una luz y la esperanza:
la estrella que con más fulgor brillaba,
que me miraba, ¡era ella!
Y así fue creciendo esa ilusión
en una niña que a su madre perdió,
y nunca pudo tener ni sus caricias
ni el consuelo de ver sus rasgos dibujados
en un simple retrato;
pero en el fondo de mi pecho
uno yo le he forjado,
y es tan hermoso
que siempre, siempre, lo llevaré grabado.
Trocada ya en mujer no contemplo la estrella
pero guardo este recuerdo de mi infancia
y sé que desde el cielo nos contempla
e intercede ante Dios por nuestra dicha.
Avelina
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